El año 2060 aún es lejano. Aún no lo sentimos tan palpable como podríamos sentir los siguientes cinco años de nuestra existencia. Sin embargo, esta crisis, ocasionada por un virus, está brindando un cambio irreversible en nuestra existencia y creo que ese será el pilar del año 2060, la alteración a nuestra forma de interactuar.

El coronavirus, al forzarnos a permanecer aislados del resto de las personas, nos obliga a buscar la forma de interactuar con los demás tanto para mantener la cordura como para poder continuar con nuestros trabajos y actividades cotidianas. Estamos aprendiendo que podemos estar junto a los demás sin importar la distancia física que nos separa.

Me parece que esto es el inicio del cambio principal para ese año. Las interacciones por los medios digitales serán mucho más avanzadas de lo que son ahora. Veo la posibilidad de utilizar lentes de contacto que nos permitan ver hologramas, cambiando por completo aspectos como la interacción de persona a persona, la mercadotecnia (veo los espectaculares en la calle funcionando como hologramas), la forma en la que apreciamos una película.

Por otro lado, me gusta imaginar que las ciudades mantendrán su aspecto actual con la implementación de estas tecnologías, llevándolas a un aspecto similar al “cyber-punk”. Siguiendo esa corriente, también presiento que los androides empezarán a ser algo real, no al punto en el que se comporten como humanos, pero empiezan a ser algo real, tal vez usados para realizar tareas cotidianas como la limpieza del hogar.

Creo que estos cambios harán que, cada vez, la distancia importe menos. El año 2060 puede brindar la culminación del cambio que apenas está iniciando. La gente que desarrolla tecnología está notando las deficiencias en los sistemas actuales y enfocarán sus esfuerzos para lograr una mejor experiencia en la comunicación digital. La realidad aumentada ya es una realidad, el implementarla en un dispositivo como un lente de contacto no suena tan descabellado si pensamos que estamos a 40 años de esos tiempos, en especial si conocemos la ley de Moore, que establece que la cantidad de transistores en un circuito integrado se duplica cada dos años. De esta forma, podemos pensar en que estos hologramas son, tan sólo, una implementación más desarrollada de lo que ahora tenemos y conocemos como realidad aumentada, simplemente se trata de enfocar los esfuerzos para llevarla a una comunicación eficiente que nos haga sentir que las otras personas están con nosotros sin importar la distancia o el momento. El año 2060 puede culminar este avance para que esté completamente establecido entre todos nosotros, un cambio que inicia ahora.

La crisis actual será recordada como la razón que propició estos cambios, de la misma forma que el temblor de 1985 ocasionó un cambio severo en las reglas de construcción y la vida de personas. El coronavirus ocasionará que la tecnología se enfoque en acercarnos cada vez más.